El que parte y reparte…

En teoría todas las personas tenemos los mismos derechos, ¿Pero se cumple esto en la práctica? ¿Os parece justo el reparto de los recursos en clase? ¿Y en tu barrio? ¿Y en el mundo? ¿Qué podemos hacer nosotros para evitar estas injusticias?

En teoría todas las personas tenemos los mismos derechos, ¿Pero se cumple esto en la práctica?

¿Os parece justo el reparto de los recursos en clase? ¿Y en tu barrio? ¿Y en el mundo?

¿Qué podemos hacer nosotros para evitar estas injusticias?

Se distribuye la clase en tres grupos:

1. en uno habrá un gran número de personas y se les trasladará a un espacio tan pequeño que casi no quepan de pie, además se les repartirá un lápiz y un folio;

2. otro grupo estará compuesto por muy pocas personas y contarán con un espacio muy amplio, este grupo dispondrá de gran cantidad de material para trabajar (lapiceros, rotuladores, pinturas, gomas, folios de colores, etc);

3. en un tercer grupo la proporción de gente, espacio y material será proporcionada.

Cada grupo deberá confeccionar un cofre o una caja para guardar el material que habitualmente se utiliza en las clases de plástica. Ocurrirá que el grupo “multitudinario” apenas tenga espacio ni materiales para hacerlo. De esta forma y viendo a los otros grupos, la reflexión girará en torno al injusto reparto de recursos. No obstante, lo más importante de esta actividad es experimentar lo que supone ser víctima de una injusticia, la impotencia que genera no tener medios para realizar algo y comprobar las posibilidades de las personas que cuentan con recursos y las de aquellas que no los tienen.